Descripción
El cheesecake de fresas es una deliciosa variante del clásico postre de queso.
Esta versión incluye una base de galleta triturada y una suave mezcla de queso crema y crema de leche, sobre la cual se coloca una jugosa pulpa de fresas frescas. Es un postre perfecto para disfrutar en cualquier época del año, pero especialmente en verano, cuando las fresas están en temporada.
El cheesecake en sí tiene una larga historia que se remonta a la antigua Grecia y Roma. Los antiguos griegos ya conocían el queso y lo utilizaban en sus platos, incluyendo el postre llamado “plakous”, que era una mezcla de queso, miel y trigo. Los romanos también hicieron su aporte a la creación del cheesecake, creando una versión que incluía queso ricotta y miel.
En la Edad Media, el queso fue reemplazado por requesón y los europeos comenzaron a hornear pasteles dulces con esta base. Fue en el siglo XIX que se popularizó el uso de queso crema en la receta, especialmente en Estados Unidos.
El cheesecake de fresas es una variante relativamente moderna del postre, pero ha ganado gran popularidad en los últimos años. La mezcla de la cremosidad del queso con la acidez y dulzor de las fresas es simplemente irresistible.
Alérgenos
No podemos garantizar la ausencia de trazas, ya que en nuestro obrador se fabrican otros productos que contienen algunos de los principales alérgenos.
Si te gusta el chocolate, tienes la opción del cheesecake Oreo.
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